Los niños tienen una gran cantidad de necesidades nutricionales, pues están en una etapa de crecimiento en la que una buena alimentación es crucial. Como padres, lo normal es procurar que la dieta sea completa y que todo lo que les hace falta, quede perfectamente cubierto.

Sin embargo, su apetencia o actitud no siempre va alineada con lo que realmente necesitan para su salud. Es más o menos común que nos encontremos ante niños y niñas que no tienen apetito y que nos causen grandes quebraderos de cabeza en cada comida, merienda y cena.

¿Qué hacer ante esta situación?, ¿cómo podemos ayudarles a comer mejor? En este artículo te mostramos algunas pautas para abordar este problema tan común en la infancia y te explicamos el papel de las vitaminas para abrir el apetito.

Falta de apetito en niños: ¿por qué ocurre?

La falta de apetito en niños puede tener diversas causas, la buena noticia es que no todas ellas tienen por qué ser de gravedad. Lo primero que cabe destacar es la diferencia entre la falta de hambre en la infancia y la percepción particular de los padres, pues es interesante tener una visión realista de la situación y fijarse en si de verdad ha cambiado el hábito alimenticio de los pequeños.

El hambre se regula mediante diferentes factores. El más evidente es la necesidad de obtener energía para superar el día, pero esto viene combinado con el estado del aparato digestivo, del metabolismo, las glándulas endocrinas e incluso el aspecto psicológico.

Cuando hay cambios en alguno de estos factores o pequeñas alternaciones, al apetito puede variar tanto en los niños como en las personas adultas. Por lo tanto, algunas enfermedades digestivas pueden producir esta situación, también los episodios de estrés o causas tan simples como la sensación excesiva de calor, que apaga el hambre.

No obstante, las causas más comunes para la falta den apetito durante la infancia son las cuestiones fisiológicas que son a menudo pasajeras o bien una conducta de alimentación que no está siendo acertada por parte de los padres. Cuando se trata problemas para comer en los bebés, sin embargo, lo más habitual es que se trate de una infección. 

¿Cómo combatir la falta de apetito en los niños?

Cuando los pequeños se niegan a comer o argumentan que no tienen apetito, es importante tomar cartas en el asunto cuanto antes, ya que en esta etapa es muy importante cubrir las necesidades nutricionales. 

Por lo tanto, hay algunas medidas que se pueden tomar de forma más o menos inmediata para intentar solventar esta situación o, al menos, para intentar mejorarlo antes de obtener la ayuda de un pediatra. A continuación, te las mostramos.

Intentar valorar la causa

Lo más inmediato será tratar de identificar la causa, ya que puede ser más sencillo de lo que pensamos. Podemos hablar con el pequeño si ya se puede comunicar correctamente, o bien fijarnos en su comportamiento. En este punto podemos detectar que se trata de ciertos alimentos que no le gustan o que tiene algún tipo de intolerancia, dolencia o rechazo a algún ingrediente. Sabiendo por dónde van los tiremos, sabremos cómo actuar.

Una dieta adecuada

Intentar proporcionar una dieta adecuada y nutritiva será crucial cuando no comen bien, pues por poco que consigamos que consuman sabremos que estamos consiguiendo que se carguen de vitaminas, minerales y nutrientes. A veces, una dieta inadecuada también puede llevar a la falta de interés por la comida.

Los métodos de alimentación

Los métodos son importantes, pues pueden llevar fácilmente a esta situación. Nos referimos a la forma en la que comen los niños y el contexto en el que lo hacen. Es interesante buscar buenos hábitos como comer siempre en el mismo espacio y a la misma hora. Hacerlo lejos de las distracciones, como la televisión o la tablet, y en un periodo de tiempo que no se prolongue durante horas.

Apoyo psicológico

Como uno de los factores ante la falta de apetito puede ser una cuestión psicológica, también es interesante poner el foco en este aspecto. Para ello, es crucial otorgar apoyo desde casa y estar más pendientes de los niños para entender sus necesidades, también se puede buscar ayuda en el centro escolar y, especialmente, si se alimenta en algunas ocasiones en el comedor del colegio.

Suplementos nutricionales o vitaminas para el apetito

Cuando la falta de hambre lleva a una deficiencia nutricional o cuando la situación se alarga en el tiempo, es interesante acudir a los suplementos para que tengan todo lo que necesitan o bien optar por vitaminas para abrir el apetito. Hay algunas marcas especializadas en estos productos como ValentiaBiologics que tienen una amplia gama de soluciones para los pequeños. Más adelante te mostramos algunas recomendaciones para emplear este método con seguridad y eficiencia.

Recomendaciones básicas sobre vitaminas para abrir el apetito en niños

Emplear vitaminas para abrir el apetito en niños puede ser una solución cuando este problema se nos enquista, ya que la buena alimentación es muy importante en la infancia y no hay que dejarlo pasar. No obstante, es conveniente seguir ciertas recomendaciones a la hora hacerlo.

Consultar con el pediatra

Al emplear esta solución para que un niño recupere las ganas de comer, es importante hacerlo con la supervisión y el consejo de un pediatra. Estos profesionales son los que nos guiarán para usar estos suplementos con seguridad y los que nos confirmarán si se trata de la mejor solución en este caso.

Emplearlo el tiempo adecuado

Una vez se determine que emplear las vitaminas es una buena alternativa, es crucial hacerlo durante el tiempo que estipulemos con el pediatra y siguiendo las indicaciones correctamente. Es la forma en la que van a funcionar como esperamos y evitando que surjan inconvenientes.

Usar una marca de confianza

Es interesante apostar por una marca de vitaminas que sea fiable y experta en la fabricación de este tipo de suplementos. Te recomendamos la que mencionamos anteriormente para que tus hijos obtengan la mejor calidad.